El 22 de Junio de 1941, se inició el Roverismo en el Perú con el Clan de Rovers del Grupo Lima 1 (Recoleta), siendo el primer Coordinador el Padre Chiafredo Scalevandi, esta fecha es importante para cada uno/a quienes apostamos por un Roverismo fuerte y unido, es por ello que la Comisión Nacional Rover, tuvo la estupenda idea de hacer una convocatoria abierta a todos los ex-coordinadores de Clan, coordinadores actuales y presidentes de Junta de Clan; permitiéndonos conocer nuestro pasado, nuestro presente y nuestro futuro.
La palabra de los invitados, tuvieron la atención de los nuevos dirigentes del Roverismo quienes pudieron encontrar en sus historias las tradiciones y anécdotas del Roverismo peruano, llegando a la conclusión de que hay que mantener viva esa llama encendida durante muchos años por grandes coordinadores de la Comisión Nacional Rover, entre ellos y mencionado por muchos a Alberto Prado Marchese.
Hay tradiciones que debemos mantener vivas, el Roverismo peruano es una de las pocas ramas que ha logrado con los años generar tanta mística en sus miembros y en sus acciones, que podríamos encontrar en cada palabra o en cada simbología, el porque se decidió que fuese así, la Cruz de San Jorge o la Cruz de Gules, la Horqueta, la palabra Clan, el Anagrama de la Orden de San Pablo y la vida de San Pablo patrono del Roverismo forman parte de nuestra historia.
Este evento permitió generar una breve transferencia, no solo de conocimientos, si no además del sentir y cariño que cada uno de los presentes guarda por el Roverismo peruano, como parte de la ambientación se visibilizaron la bandera de la Orden de San Pablo y una bandera de la CNR con la Flor de Lis que se encontraron entre muchas los archivos de la CNR.
Hoy en día hay una apuesta grande, por fortalecer el Roverismo en el Perú, apuesta que muchos han asumido y que muchos acompañaran, lo importante es mantener nuestra llama encendida, llama que es responsabilidad de cada uno de los que en el país gritamos al final de cada reunión: ¡¡ Servir!!
